Por Agustín Baccá.
No es Hermética, tampoco un tributo. A 35 años de su separación, esta es la única forma de escuchar esas canciones en vivo que tanto significan para la patria metalera nacional. Es la voz de Claudio O`Connor y el machaque del Tano Romano; son el baterista Javier Rubio (en reemplazo del Pato Strunz) y Karlos Cuadrado en el puesto del recordado Ricardo Iorio.
Clima ideal. 20 grados para una noche de música pesada en Obras Sanitarias.
Ya en los alrededores, remeras negras con estampas de Hermética, Iorio, V8, Slayer y más daban la garantía que la fauna estaba reunida.
Adentro, el patio cervecero a la izquierda del escenario y atrás el merchandising oficial a 25 mil pesos la casaca (con púa de regalo). Dos pantallas a los costados proyectando las salidas de emergencia y mensajes de “cuidar las pertenencias”.
Entre los clásicos cánticos afirmando que “Iorio es lo más grande del Heavy nacional” y “somos los negros, somos los grasas pero conchetos no” se colaban algunos insultos dirigidos al actual presidente argentino, Javier Milei. Cosa que fue intensificándose durante toda la noche. "Cualquier tema de Hermética de aquella época refleja la realidad” declaró el Tano Romano la semana previa en una entrevista al Destape. Encima era 12 de octubre y Milei había tuiteado un provocador “Celebramos el Día de la Raza”. Y (alerta spoiler) por alguna razón, los muchachos no tocaron “La revancha de América”.
A lo que vinimos. “Soy de la Esquina” entró como patada de canguro y doble bombo en el pecho, seguida de “Craneo Candente” y “Víctimas del Vaciamiento”. Atrás de los músicos, una escenografía de ciudad destruida, totalmente en ruinas, con tachos de residuos nucleares de verde fosforescente.
La H en Obras pic.twitter.com/WNTuYxy3Bz
— Agustín Baccá (@AgustinBacca) October 13, 2024
Sorprendió la inclusión de canciones 100% Iorio como “Del colimba”, “Desde el oeste” y “Del camionero” muy celebradas por todo el auditorio, con O`Connor usando su faceta de voz grave. Confieso haber tenido piel de pollo en esos momentos.
“Hoy lo recordamos para siempre y que su legado no muera nunca” fue el mensaje del vocalista para Ricardo, provocando el aplauso más fuerte de la velada. Todo lo contrario desencadenó “Olvidalo y volverá por más”, aquel clásico anti político, con silbidos y más canciones anti Milei. Puño levantado y “¡Viva los laburantes!” al final de “Gil Trabajador”.
También incluyeron “Vencedores vencidos” canción que no terminó de conmover, quizás por ser demasiado ricotera (la versión original es insuperable) momento en el que me lamenté por aquellas bandas que tanto nos significaron, pero que nunca, por diferentes motivos, van a reconciliarse.
El final, imbatible: “Atravesando todo límite”, “Vientos de poder” y “Tú eres su seguridad”. Dos horas del género más orgulloso del mundo que nos dejó a todos con la energía renovada para seguir encarando este presente político, económico y social que pareciera dar sus primeros chispazos de inconformidad. Y el ciclo vuelve a repetirse, una vez más.
PH: Dani Sciata / @danisciata
Cobertura Audiovisual: Nadya Cabrera / Valen Arislur
