El hecho ya forma parte de la historia: el 8 de diciembre de 1980 David Chapman asesinó de cinco disparos a John Lennon, el ex Beatle que ya era considerado como uno de los más grandes compositores de la historia del rock.
Sin embargo, quien ya era una leyenda viviente tenía obligaciones mundanas como cualquier persona y una de ellas era firmar una carta mecanografiada en la que otorgaba un poder para que tres personas pudieran participar de la reunión de accionistas de Apples Corps Limited (la compañía de los Fab Four) que tendría lugar en los días próximos.
Ese mismo papel es el que se subasta por estos días y se espera que alcance un valor que oscila entre los 30.000 y 50.000 dólares.
El documento no fue lo único firmado por el artista antes de ser asesinado, en las horas previas también había rubricado una copia de su último trabajo Double Fantasy, nada más y nada menos que a la misma persona que le dispararía. Ese ejemplar se subastó en 2020 y alcanzó un valor de casi un millón de dólares.
Chapman, por su parte, ahora tiene 67 años y le fue negada la libertad condicional una docena de veces a lo largo de los años. Recientemente compareció ante una junta de libertad condicional a fines de agosto, y ahora deberá esperar a febrero de 2024 para volver a presentarse ante el Departamento de Correcciones y Supervisión Comunitaria del estado de Nueva York.